Viernes 19 de Abril del 2024, 12:40 am - Año IX
 


¿Y como paramos de darles el poder?

(jmleivacaro).- El poder lo entregamos con cualquier actividad cotidiana, con cualquier cosa que consumimos, con cualquier servicio que utilizamos, cuando trabajamos, cuando pagamos impuestos, cuando votamos, etc, Si bien la mayor o menor contribución que podamos hacer con nuestro poder al mal de este mundo, depende de quien y cuanto centralice ese consumo o servicio, trabajo, etc, pues cuanto mayor es la organización, y más secretas sus directivas, mas posibilidades de que ese poder que entregamos sea mas mal utilizado, contra nosotros.


 
Por ejemplo, parte de los impuestos que manejan los estados también se utilizan para guerras, asesinatos, someter a la sociedad enferma, adoctrinarla, etc., alimenta un nivel mucho mas alto de corrupción, que no ocurre, por ejemplo, con los impuesto de carácter local o municipales. Con los servicios nacionales de salud, o las grandes corporaciones farmacéuticas, existen prácticas de intoxicación masiva, de deterioro de la salud y manipulación de las enfermedades, cosa que no ocurre si utilizamos tratamientos naturales y locales, y menos aun, si nos hacemos individualmente responsables de nuestras salud con una alimentación adecuada y una vida sana. Todos los productos que elaboran las grandes corporaciones, ya sabemos de sus prácticas, tanto en explotación de mano de obra de gente mas débil y desfavorecida, como en imponer sus monopolios, como la contaminación del medio natural y la esquilmación de recursos naturales, como la imposición de programas de obsolescencia programada, etc Quiero decir, que la primera regla para no entregar nuestro poder, e ir retirándolo poco a poco, es procurar descentralizar nuestro consumo, nuestro trabajo, hacia un consumo más local, hacia organizaciones o empresas mas pequeñas, creando cooperativas, etc, donde tenemos más control de los procesos productivos y de quienes gestionan esos organismos o empresas.
 
Si bien, el consumo, canalizado de este modo, es una resultante consecuencia de lo que somos y de nuestra actitud ante la vida y ante nuestro entorno social, de ese modo, en realidad el poder lo entregamos básicamente cuando nos enfrentamos entre nosotros, cuando nos tenemos miedo, cuando competimos, cuando nos fraccionamos en ideologías. Gracias a que hay una sociedad dividida, enfrentada, se necesitan partidos políticos que representen esa división y enfrentamiento, y les damos nuestros poder que a su vez lo utilizan para más enfrentarnos. Cuando nuestra respuesta ante un posible amenaza es en agresión, buscamos ese poder que nos proteja en agresión, que no es otro que el que le damos nosotros, ellos serán quienes instigaran ese miedo, atentando directamente contra nuestra seguridad, para que continuemos dándole más y más nuestro poder. Si se nos inculca la idea que hemos de competir para sobrevivir, ellos proporcionan el medio, el dinero, para que podamos competir, y mediante el dinero le damos el poder, si nos estrangulan con el dinero nos aferramos mas a él y nuestra competencia y explotación es más feroz entre nosotros. Con el consumo, nosotros le damos nuestro poder tomando los productos que ellos nos ofrecen, y ellos nos proporcionan productos que que han de quedar inservibles lo mas pronto posible, que nos creen adicción, que nos enferman, etc, para que así nuestra dependencia sea cada vez mayor y cerrar cada vez más el cerco de nuestras necesidades, concediéndoles así nuestros poder compulsivamente.
 
Por tanto, les damos nuestro poder cada vez que nos enfrentamos entre nosotros en la diferente opciones ideológicas, cada vez que consumismo lo que ellos nos ofrecen, cada vez que respondemos con miedo y violencia ante una posible amenaza, cada vez que competimos entre nosotros, cada vez que utilizamos su dinero, cada vez que utilizamos su sistema sanitario, cada vez que pagamos impuestos, cada vez que nos informamos con sus medios de comunicación (que excepto Internet, todos los medios de información masiva son de ellos)
 
Cada vez que utilizamos algo de este sistema que no podemos controlar por nosotros mismos le estamos dando el poder a alguien que lo va a emplear en fomentar y agudizar esa necesidad, y de ese modo nos procura una sociedad amenazada, un sociedad fuertemente competitiva, una sociedad enferma, una sociedad temerosa de si misma, una sociedad esclava y dependiente de los grandes organismo
 
Por tanto, para salir de esta espiral diabólica de sometimiento son muchas cosas que se pueden hacer, y hacer por nosotros mismos, sin tener que pedir a nadie que las haga por nosotros. No hay nada que pedir, no hay nada que protestar, no hay nada que resistir, solo actuar, toda la capacidad de acción está en nuestras manos
 
No engañarnos ni explotarnos en el trabajo y en los negocios, en general ser respetuosos generosos con los demás y mostrar la conducta y el favor que esperamos de una sociedad solidaria. No utilizar el sistema sanitario en la medida de lo posible, podemos tener una salud perfecta solo con la alimentación adecuada. En la medida de lo posible, no hacer intercambios directos, recíprocos, en todo aquello que podamos, no utilizar el dinero, ni ninguna forma de trueque, dedicar el tiempo que deseemos a hacer lo que nos gusta y entregarlo desinteresadamente, sin esperar nada directamente a cambio. Es decir, si haces un servicio, o das algo a alguien, ese alguien si por gratitud desea contribuir, que haga su servicio a los demás, no necesariamente y directamente a ti. Y sobre todo actuar con el ejemplo, menos hablar y más actuar, menos pedir y más actuar, menos protestar y quejarse y mas actuar. Hay muchas cosa que se pueden hacer en pro de nuestra libertad, unas cuestan más de aplicarlas que otras, pero todo se puede hacer poco a poco, solo hay que ponerse en marcha en esa dirección, hacer por los demás lo que a cada uno le guste hacer o donar, lo que le sea mas sencillo y asequible, en el tiempo que desee emplear, sin esperar directamente nada a cambio, y que el propio hacer, lo que a cada cual nos gusta hacer, sea la recompensa. Es bien sencillo y a su vez gratificante. Hacer lo que nos gusta hacer, en libertad, sin mirar a quien, y cuando nos queramos dar cuenta, toda esa abundancia que hemos puesto en marcha, nos alcanzará inevitablemente. No hemos de temer nada, si vamos a ser, o no, recompensados adecuadamente, si alguien se puede, o no, aprovechar de nuestro esfuerzo, por que todo es abundancia a nuestro alrededor, y lo hemos hecho, haciendo lo que nos gusta hacer, trabajando en total libertad, esa es la mayor bendición y recompensa, y nadie podrá utilizar nunca más nuestro trabajo para hacernos daño y someternos.
 

 
Esta es mi contribución:
 
 
De forma gratuita me gustaría ofrecer, tanto como servicio a empresas, a comercios como a particulares:
 
Para autoescuela y particulares: Consejos de conducción segura y eficiente acompañando en vehículo.

Para empresas de transporte: Acompañar a conductores noveles en la conducción de vehículos de mercancías para transmitir experiencia

Particulares: Trabajos de bricolaje en casa

Empresa y particulares: Trabajo de peón ayudante en agricultura ecológica

Hacer una paella vegetariana a alguien

Invitar a comer a alguien en casa

Empresa y particulares: Trabajo de peón ayudante energía solar, o energías libres

Empresas y particulares: Instalar depuradora de agua de osmosis
 
 

Necesito dar:
 
Libros de conocimiento y espiritualidad

Medio coche

Una cama litera

Una estufa de gas

Un microondas
 
 
 
 

 



Tu comentario: Normas de uso
  - Esta es la opinión de los internautas, no de UniversalNews.Net
  - No está permitido verter comentarios contrarios a las leyes españolas o injuriantes.
  - Reservado el derecho a eliminar los comentarios que consideremos fuera de tema
Nombre - obligatorio
Correo electrónico - obligatorio
Página web/blog - si desea mostrarla





 Lo más leído 





  © UniversalNews.net 1999 - 2024
Newspaper v0.3 - Desarrollado por vimarado.com